COPA MASTER DE LONDRES: EL SUR TAMBIÉN EXISTE

La última jornada del mayor espectáculo del mundo deportivo se dirime hoy con dos protagonistas inesperados. Davydenko no es una sorpresa, porque ya tiene en su haber una final de master, perdida eso sí, precisamente en la edición anterior, contra Novak, "Nole", Djokovic. La sorpresa viene por la eliminación del número 1 del mundo, Roger Federer, que cayó por primera vez ante Davydenko, en su décimo tercer choque, y tuvo tiempo para señalar al equipo español como favorito en la Copa Davis ( ¡¡¡Encima, adivino!!!). Pero por mucho que proteste si analizamos un poco los partidos ayer, tenemos:

SÉPTIMA JORNADA, SÁBADO 28 DE NOVIEMBRE DE 2.009: Semifinales. Grupo A: Federer - Davydenko: Desastroso primer set del suizo, con un porcentaje de saque paupérrimo. Vamos, que no metió una. Y eso, ante un jugador tan duro como el ruso, pasa factura. En el segundo, el de Basilea se puso el mono de trabajo para enderezar la nave, logró empatar a base de golpes de magia. Una observa y no sabe de dónde se saca todo ese talento. Juego de manual. En el tercero, cuando se barruntaba un tie break, otra gracia del suizo, se permitió ceder el servicio en los últimos compases del set y, ¡¡¡hala, a palmar!!!.2-6, 6-4, 5-7

Grupo B: Juan Martin del Potro vs Söderling . Como siempre, el sueco jugando a lo suyo, basando todo en el saque, renunciando al cuerpo a cuerpo, y sacando de quicio al bueno de "Delpo" y de paso a los sufridos televidentes. Representante del antitenis, más soso que una seta y más borde que una maruja en rebajas, Robin se las prometía felices en el segundo, pensando que tenía el camino allanado al haber ganado el primero en la muerte súbita. Pero Juan Martín supo tener paciencia, no desesperó, y pese a que por momentos se le vió descentrado, logró lo imposible, rompió el servicio del inaguantable escandinavo - ¡¡¡es que no puedo, me cae como el culo desde su desplante a Nadal en Roland Garros!!!-, y empató el choque. El tercero, un carrusel. Cuando Del Potro perdió su saque en el final del set y ya nadie daba una libra por él, resulta que Robin se puso nervioso, e hizo lo que nunca, cedió el suyo, en una especie de síndrome inexplicable de, con perdón, cagadas por imitación. Al desempate. Y como estaban en reserva, las bolas ya no entraban. Victoria para el de Tandil, provincia de Buenos Aires, 6-7, 6-3, 7-6 El sur también existe, decía Benedetti y cantaba Serrat. ¡¡¡Aguante Argentina!!!